Eurovisión, ¡qué risión!

Señoras y señores, niños y niñas, sapos, culebras y guepardos. Servidora acaba de darse cuenta de que este blog está en pecado. Pero en pecado capital, en pecado de los buenos, de los que en el infierno se castigan introduciendo estacas afiladas por orificios innobles que no merece la pena mencionar.

Nadie mejor que El Bosco para ilustrar sutiles torturas infernales.

¿Cómo podemos enorgullecernos de ser un blog que difunde la estulticia, la memez, la chorrada, la supina tontería y no haber dedicado todavía una mísera línea al evento que desde hace unos años se ha ido convirtiendo en el buque insignia de la horterez-del-copón?

¡Sí, queridos humanistas! ¡Me estoy refiriendo a la celebérrima gala de Eurovisión!

Tan tan tan tarán tan taaaaaararan...

Mucho ha llovido desde que Massiel dejase al jurado boquiabierto con su cansino La-la-la, o desde que Salomé les cautivase con el hipnótico meneillo de su mono de flecos azul celeste.

Hasta nuestro queridísimo Raphael, el mejor artista español del mundo mundial (con permiso de Manolo Escobar)…

Manolo, manolo... ¡la crisis nos aprieta a todos!

…se dejó en su día caer por aquestos lares… ¡dos veces! Aunque sin duda, la mejor con su famosísima canción Estoy aquí. ¡Qué fuerza! ¡Qué poderío! ¡Qué movimientos más genialmente espasmódicos!

Por desgracia, a pesar de ser poseedor de un disco de uranio, no ganó. Injusticias de la vida. Estos europeos incultos que no saben valorar un artista como la copa de un pino…. ¡Al diablo con ellos! En La Catarsis Erasmista te amamos igual.

Esta señora, seguramente una vecina de Ciempozuelos, sabe de lo que hablo.

Otros personajes ilustres del panorama musical casposo español han hecho las delicias del público asistente a este festival. Me estoy refiriendo por supuesto a nuestro gran Julio Iglesias, con su sensual pasotismo a la hora de coger el micrófono…

…o a Sergio “Carraspera” Dalma, hecho un mozalbete con melenas al viento.

Y cómo olvidar a la archiconocida Rosa de España y su Yurops living a celebraishion’, que hizo que todos volviéramos a ver esta fiesta de la canción con fuerzas renovadas.

Pero amigos humanistas, Eurovisión hace ya muchos años que no es lo que era. Estamos muy lejos de aquel Eres tú que aún hace que a mi madre se le salte alguna lagrimilla melancólica. Requete-requete-lejos de los años dorados, en los que se presentaban cantantes de verdad, como los suecos ABBA y su Guaterlú’ o Cliff Richard y su Congratuleishions’, las baladas irlandesas…¡7 veces han ganado ya los tíos!

En fin, de poco sirve mesarse los cabellos por el lento deterioro del festival, que ya ha cumplido las 57 ediciones. Mejor que eso, regocijémonos todos, pues si bien Eurovisión ha ido perdiendo prestigio a pasos agigantados, en lo que se refiere a absurdez, bobería y chichinabesquismo (que es lo que nos gusta en este blog)… ¡Hoy en día es el amo!

Por eso sin más dilación paso a presentaros mi...

TOP 12 DE CANCIONES DE CHICHINABO EN EUROVISIÓN

(Sí, sí, doce. ¿Algún problema?)

12. Empezamos en duodécimo lugar con producto nacional ¡Las Ketchup! Y una actuación que podría titularse “procrastinación y pereza en grado superlativo”. Y es que las señoritas tuvieron las santas… gónadas de cantar sentadas casi toda la canción. “Nooo, es que queríamos hacer una coreografía diferente…” sí, sí… ¡os hemos pillado vagas de siete suelas!

11. En decimoprimer lugar, recién llegados de la isla esmeralda (y no son los únicos, ya veréis)… ¡los gemelos irlandeses! Creo que son los hermanos pequeños de Lady Gaga, o bien unos clones que quedaron un poco canijos, sus hombreras y peinado los delatan:

10. El décimo puesto podríamos considerarlo una especie de remake de Siete novias para siete hermanos. ¿Y qué me decís de la cuerda de tender? Juzgad vosotros mismos, a mí estos bosnios me dejan sin palabras:

9. Noveno lugar para unos sombreros como poco, curiosos, que me recuerdan a los caraconos. Adelante, Moldavia:

8. En el octavo puesto… ¡la familia al poder! El señorín que se llevó a la abuela para que tocase el tambor. Se ve que se aburría la mujer, venga a hacer calceta en casa. Moldavia one more  time…

7. El séptimo puesto es para este indescriptible espantajo de los melones plateado que tuvo a bien presentarse por Ucrania el año 2007. Sublimemez absoluta.

6. En sexto puesto, una petición especial de mi hermano, que desde hace años se traga Eurovisión (con sus dos semifinales previas) de principio a fin conmigo. Además, ¿cómo no iba a estar en este ranking un señor que se hace llamar Rambo Amadeus? Ahí va Euroneuro, dislate sin igual:

5. Abrimos el top cinco con un español que no necesita presentación y estamos hartos de ver, pero que no podía quedarse fuera de este ránking:

4. En el cuarto lugar bajamos a los infiernos fineses para toparnos con unos  simpáticos monstruitos, que encima ganaron. Sólo por el micrófono-hacha y las plataformas del cantante se merecían estar en esta lista. ¡Arriba  Lordi!

3. El bronce es para alguien que conocemos muy bien. Y es que si en el puesto anterior hemos descendido al Averno, en esta ocasión nos toca ascender a los Cielos. Señores, hablo de aquel año en que Nuestro Señor Jesucristo, en su infinita sabiduría, decidió personarse en Eurovisión, calzarse unas gafas de sol, y representar a nuestros vecinos franceses. En verdad, en verdad os digo que debéis ver este vídeo:

2. La plata se va a las estepas siberianas. ¿Cómo íbamos a dejar fuera a estas entrañables abuelitas rusas? Mujeres del Norte, todoterreno. Igual te hacen unas empanadillas de atún, que te cantan un exitazo de lo más fiestero ¡o todo a la vez! Una actuación para disfrutar de principio a fin:

1. Y por fin hemos llegado al mejor de los mejores, al number one. En mi opinión la actuación más surrealista de la historia de Eurovisión, por cortesía de Irlanda. No quiero desvelar la identidad del cantante, os daré el placer de poner cara de “WTF????” cuando abráis el vídeo.

En fin, espero que hayáis disfrutado tanto viendo estos vídeos como yo eligiéndolos. No obstante, no quisiera  cerrar esta entrada sin hacer mención a la que durante tantos años ha sido la voz de Eurovisión en España, José Luis Uribarri, recientemente fallecido. Sin sus pronósticos siempre acertados ver Eurovisión no es lo mismo. 

Y no digo yo que su sustituto, José María Íñigo lo haga mal, nada más lejos de la realidad. Es un hombre que aunque solo sea por su bigote ya es digno de admiración y fuente de inspiración continua para las sesiones fotográficas mustachiles de los catárticos. Pero le falta algo…

Bueno, con esta nota triste después de  tanto despiporre me despido hasta próximas absurdeces.

¡A pastar humanistas!